Hablar de la historia del boxeo peruano sin mencionar a Mauro Mina sería un verdadero error. El «bombardero de Chincha» fue, sin duda, una de las figuras más destacadas del país. Sabemos que te interesa conocer desde su humilde inicio hasta su victorioso final, y es por eso que queremos mostrarte la historia de este peleador fuera de serie y su contribución al boxeo peruano. ¡No te lo pierdas!
Inicios en Chincha
La provincia de Chincha, Perú, fue el lugar que le dio la bienvenida a Mauro Mina Baylón el 22 de noviembre de 1933.
La infancia del pequeño no fue nada fácil; con apenas dos meses de edad perdió a sus padres Mercedes Baylón y Rómulo Mina, por lo que el abuelo paterno fue el encargado de cuidarlo durante un corto periodo de tiempo.
Casi inmediatamente Mauro comenzó su crianza en casa de Mamita Rosa, como se le conoció a la familiar que se haría cargo del niño desde ese momento en adelante. Por supuesto, no pasó mucho tiempo para que la necesidad tocara la puerta del pequeño hogar y Mauro tuviese que atenderla.
A partir de los 7 años el pequeño dividía sus días entre el estudio y un matadero cercano donde comenzó a trabajar para ayudar a Mamita Rosa. Se dice, entonces, que Mauro bebía sangre de las reses recién sacrificadas para obtener su fuerza.
Iniciando su adolescencia (y gracias al trabajo desempeñó desde niño), Mauro Mina ya tenía la contextura que lo ayudaría a ganar numerosas peleas en el futuro.
Mauro Mina: la nueva promesa del boxeo peruano
El llamativo físico de Mina no pasó desapercibido ante los ojos de técnicos y preparadores deportivos. El primero de ellos fue Kito Ríos, de la Liga de Boxeo de Chincha, quien invitó al adolescente a luchar contra Trala, un camionero.
Con apenas 15 años Mauro derrotó a su contrincante y demostró, por primera vez, que podría tener un futuro brillante dentro del boxeo.
Confiando en las recomendaciones recibidas en su llegada a Chincha cuando corría el año 1948, el entrenador José «Botija» Alejo buscó a Mauro Mina y comenzó a pulir sus habilidades en el ring.
Poco tiempo después el luchador ya estaba preparado para enfrentarse a contrincantes de casi cualquier tipo. Jóvenes de su misma localidad fueron los primeros en ser derrotados por el «bombardero de Chincha», y a ellos les siguieron habitantes de Pisco y Cañete.
Después de demostrar todo su potencial, el entusiasta Mauro siguió su preparación en Lima, pues estaba claro que tendría mejores oportunidades en la capital peruana.
Primeros pasos fuera del Perú
Con apenas 20 años Mina ya era considerado un luchador con un futuro prometedor, y por eso sus entrenadores no dudaron en enfrentarlo a numerosos peleadores en Lima.
Sin embargo, su primera victoria significativa ocurrió en su pelea contra Manuel Vargas, un chileno que ya era reconocido como un excelente peleador. Mientras que continuaba con otras tantas peleas en Lima, Mina ya se preparaba para comenzar a luchar fuera del país.
Aun así, su primera participación significativa fuera de los límites del Perú no fue tan positiva como esperaba. Su derrota contra el brasileño Luiz Inácio fue la primera experiencia internacional que tuvo Mauro, pero lejos de desanimarlo este resultado lo impulsó a pulir sus habilidades.
Es por eso que no fueron sorpresa todas las victorias que vinieron a continuación, de las que destacan unas cinco antes de pelear nuevamente en suelo internacional… ¡Y esta vez en un campeonato!
En esta ocasión fue el turno del uruguayo Dogomar Martínez de ser el contrincante de un Mauro Mina con técnicas mucho mejores que las de sus inicios. Sin embargo, el título de campeón de peso semipesado quedó en las manos de Martínez por una decisión cerrada.
Peleas más importantes de Mauro Mina
Nombrar todas las peleas de Mauro Mina podría resultar un verdadero reto, así que mencionaremos algunas de las más importantes del peruano dentro de su país natal y —por supuesto— fuera de él.
Contra Eddie Cotton el 17 de octubre de 1962
El Estadio Nacional de Lima fue el sitio que sirvió de escenario para el enfrentamiento de Mina, quien ya era considerado como uno de los boxeadores con mayor potencial de su época, contra otro de los más grandes pugilistas de todos los tiempos: Eddie Cotton.
Por supuesto, el peruano se alzó con la que sería una de sus victorias más contundentes. Más de 40.000 espectadores aplaudieron al «bombardero de Chincha», mientras que el estadounidense notó que, efectivamente, el peruano tenía mucho que ofrecer.
Contra Henry Hank el 24 de noviembre de 1962
Apenas unos meses de su encuentro con Cotton, Mina viajó al Madison Square Garden de Nueva York para enfrentarse a Henry Hank, otro grandioso luchador estadounidense.
Después de 10 asaltos bastantes reñidos, Mina logró conseguir la victoria, dejando a su oponente derribado y a punto de recibir un KO.
Nuevamente contra Eddie Cotton el 18 de enero de 1963
Lima recibió por segunda vez a Eddie Cotton para enfrentar al chinchero, y el encuentro no fue muy distinto que el primero. De nuevo Mina derrotó a Cotton en una pelea rodeada de polémica por un posible problema de salud de Mauro.
Retiro
Con las victorias mencionadas a cuestas, todo el panorama daba por sentado que Mauro Mina sería el próximo campeón mundial en la pelea que sucedería el 23 de noviembre de 1963. Sin embargo, una comisión médica detectó una operación en la retina izquierda del luchador.
Por supuesto, esta razón fue más que suficiente para que se suspendiera su participación en el ansiado campeonato. Después de algunos años luchando en peleas menores, Mina falleció en 1993 por un ataque al corazón.
A pesar de no lograr su ansiado campeonato mundial, Mauro Mina demostró que la perseverancia es la clave para triunfar aún en las situaciones más adversas, y es por eso que el boxeo peruano y mundial lo recuerdan como uno de los mejores referentes de la historia.
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